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Una imagen holográfica multidimensional brilló. La red de comunicaciones subterráneas con un dibujo preciso de los detalles más pequeños era claramente visible, sin dar ni la más mínima posibilidad de escapar.</p>
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Los generales y oficiales se animaron de inmediato.</p>
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- Ahí es donde tienes que atacar. Nuestros cohetes están listos.</p>
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- No, no golpeará. Allí el líder de la manada de monos es Polkan. Debe ser capturado con vida. Realizaremos experimentos con él, probando isótopos del dolor, y luego enviaremos su animal de peluche al museo. Oye, ¿qué estás mirando? Prepárate para aterrizar en la superficie. ¡Este planeta ya está debajo de nosotros!</p>
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Kramar sacó su formidable arma y, aunque la promesa de una muerte inminente brillaba claramente en los ojos de la rabiosa Lyra, pronunció audazmente;</p>
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- ¡No cuentes! La guerra no es - ¡Hyperfuck!</p>
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- ¡Después de la batalla, nos orientaremos! La voz de Velimara se suavizó ligeramente. - ¡Muéstrame para qué sirves!</p>
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La titánica y aterradora nave estelar, inundando todo con fuego hiperplásmico total, se precipitó como un halcón depredador hacia la superficie desgarrada del planeta.</p>
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Se produjo el primer contacto de dos civilizaciones interestelares.</p>
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Capítulo 4</p>
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Es mejor morir con una espada con dignidad,</p>
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Luchando ferozmente por el valor y el honor,</p>
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Que vivir como ganado llevado por un látigo a un establo...</p>
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¡Hay muchos héroes gloriosos en Rusia!</p>
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Los problemas, grandes y pequeños, que parecen triviales, y otros, por el contrario, con su masa, están listos para aplastar la conciencia y pisotear el alma, rodar sobre cada persona, como una ola de oleaje. Los adolescentes, como saben, tienen una psique dispuesta de tal manera que son mucho más propensos a dramatizar sus experiencias personales, olvidándose de los problemas globales. Incluso un poco a veces, como un tumor canceroso, que crece rápidamente, amenaza con llenar todos los pensamientos. Entonces, Vladimir Tigrov, de catorce años, en el momento en que el hacha del verdugo universal se cernía sobre el planeta, se sumerge en sí mismo; muy molesto por los últimos acontecimientos en la escuela. Su padre es un militar profesional y recientemente se mudó a los Urales en la región de Sverdlovsk, llevándose a su familia con él. Y los recién llegados, e incluso los de Moscú, no son muy queridos aquí. Aquí en la escuela le recetaron: como se debe, golpeándolo, rasgándole la ropa y pisoteándole el maletín. No, Tigers no es un debilucho ni un idiota, supo pelear bien para su edad. Pero, ¿qué puedes hacer solo cuando hay veinte personas en tu contra? Ekaterimburgo es una ciudad tradicionalmente conocida como ciudad criminal, a pesar de las duras condiciones de la dictadura de Medvedev. Incluso en las escuelas, sus pandillas existían y parasitaban activamente. Toda la región también vivió una vida especial, diferente al resto de Rusia. En las escuelas, bebían vodka y fumaban casi abiertamente, se inyectaban en sótanos y baños, las cámaras de vigilancia nunca funcionaban, y la policía... Todos menos los bandidos le tenían miedo. Vladimir resultó ser un joven activista demasiado correcto, un atleta de la subcultura criminal, estudió bien, y esto fue suficiente para un odio salvaje y frenético. Cuando te golpean, te envenenan todos los días, de alguna manera no quieres vivir en paz, al contrario, quieres castigar a todos. quiero tanto...</p>
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Como todo personaje fuerte, el niño Vladimir soñaba con vengarse de una fuerza superior y maligna. Nació un plan: robarle una ametralladora a su padre (es evidente que no fue sin razón que la sangre de los militares hereditarios fluyó en ella), que pronto logró llevar a cabo. Logró piratear, demostrando habilidad de hacker, el código cibernético de una caja fuerte domiciliaria donde se guardaban armas. Lo principal a recordar aquí son los detalles de la inteligencia artificial, sujeta a ciertos programas y completamente desprovista de una percepción crítica de la realidad. Llevando consigo un rifle de asalto del sistema plegable "Fox-3" y varios cargadores, Vladimir dio un paso decisivo hacia la escuela. Entre el parque descuidado hay un gran edificio de cuatro pisos diseñado para tres mil personas. Varios estudiantes de secundaria fumaban un porro, junto a ellos su principal delincuente, el líder informal de la clase, Sergey Pontovy, arrastraba. Vladimir se movió con confianza hacia su enemigo. Como esperaban los Tigres, el cabecilla gritó "¡Shuher! ¡Los nuestros están siendo golpeados!" apresuramos. El puño de Volodya, gracias al entrenamiento, no es infantilmente fuerte, por lo que Sergey seguramente obtendrá un par de moretones con garantía. Es cierto que toda la cara de Tigrov está ricamente decorada con moretones y abrasiones recientes: puedes llenar un mamut con una multitud. Los estudiantes de último año sonrieron y se separaron, queriendo disfrutar del divertido espectáculo.</p>
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Toda una bandada de chicos salió de la entrada de la escuela. Vladímir no dudó. Sacando una pequeña máquina de fuego rápido escondida debajo de su chaqueta, Tigers abrió fuego contra los delincuentes que corrían hacia él. Corrieron en diferentes direcciones. Tal vez todo se hubiera limitado al ruido, pero había muchos autos cerca con verdaderos bandidos adultos. Aparentemente, los mafiosos locales no encontraron un mejor lugar para un enfrentamiento criminal que una escuela. 13. Los mafiosos devolvieron el fuego. Las balas automáticas volaron el asfalto. Habiendo dado un salto mortal, Vladimir logró esconderse detrás de un obelisco de mármol. Borrachos de drogas, los bandidos se lanzaron al asalto con un rugido, sin tomar en serio al pequeño luchador, lo que, por supuesto, fue en vano. Cambiando febrilmente de clips, el joven Terminator mató a la mitad de la pandilla e hirió a unos veinte militantes más brutales. Los ladrones sobrevivientes intentaron desplegar un mortero portáticlass="underline" un disparo podría demoler media casa. Aunque Tigrov anteriormente solo había disparado en campos de tiro y en juegos de computadora, el estrés salvaje y la rabia loca le dieron a sus disparos una precisión sobrehumana. El mortero explotó, destrozando a los bandidos cercanos. Todo esto aplastó la resistencia del resto. En un frenesí, Vladimir disparó todos los cargadores que traía en su cartera, y solo después de eso dejó de disparar. Casi todos los disparos resultaron ser fatales y efectivos, treinta y nueve personas (en su mayoría eran mafiosos locales) convertidas en cadáveres. Varios escolares engañados también se convirtieron en víctimas del enfrentamiento. Tropezaron y rugieron, habiendo recibido diversos grados de heridas. No hubo muertos entre los muchachos, solo los bandidos adultos encontraron una muerte bien merecida. Pero de las importantes autoridades criminales, un gran traficante de drogas, apodado Viper, fue destruido.</p>