En la misma calle, tocando en el Railbird Saloon, se encontraban casualmente Gastón Villa y sus Bandoleros de Manicomio, un grupo de músicos ambulantes vestidos con chaquetas de cuero blanco con flecos, «chaparreras» de lentejuelas y los rostros casi ocultos bajo enor_mes sombreros bordeados de bolas 'cholo' de los colores del espectro ordenadas según la longitud de onda. El padre de Gastón había actua_do en rodeos con cierto número improvisado de 'charro', pero una no__zo resultó letal, así que su esposa hizo una maleta con todos sus viejos disfraces y su equipo para Gastón, le dio un beso de despedida en la estación y lo despachó hacia un futuro de saxofonista en la banda de un espectáculo del Salvaje Oeste. Obligado más de una vez a dejar sus instrumentos en prenda para pagar las facturas del hotel, las cuentas del bar y las deudas de juego, Gastón fue aceptando con el curso de los años una amplia gama de peculiares compromisos, incluido el actual.che, en Gunnison, se topó con un público cuyo concepto del recha
– Por favor, no te preocupes -tranquilizaba a Frank en ese momen_to-; ten, ¿sabes qué es? -preguntó sacando un imponente artilugio de metal deslustrado y mellado cubierto de válvulas y llaves, cuya punta superior se ensanchaba como la boca de un instrumento de banda.
– Gracias. ¿Dónde me has dicho que está el gatillo?
– Se llama Galandrónomo, es un fagot militar, en el pasado era un instrumento de las bandas del ejército francés, mi tío recuperó éste de la Batalla de Puebla, todavía se ven un par de mellas de balas mexica_nas, aquí y aquí, ¿las ves?
– Y la punta por la que se sopla -dijo Frank desconcertado-, es_pera un momento, a ver…
– Ya aprenderás.
– Pero… ¿y hasta entonces?
– Caballero, por favor, ya conoces estas cantinas, digamos que el gusto musical no es muy exigente. Ningún miembro de esta banda te_nía ni idea de música cuando se nos unió, y todos estaban metidos en algún tipo de problema. Toca 'con entusiasmo', todo lo fuerte que pue_das, y confía en la buena voluntad y el mal oído del gringo borracho.
Y así Frank se convirtió en Pancho, el fagotista. Al cabo de un par de días ya era capaz de extraer sonido del tubo y al poco tiempo le salía la mayor parte de Juanita. Con un par de trompetas tocando la armonía, no sonaba tan mal, o eso imaginaba él. A veces, hasta con_movía.
Poco antes de dejar la ciudad, Frank se sumió en un estado un poco distinto a lo que él siempre había tenido por cordura. Tras pos____________________tasma de Webb. Los otros fantasmas reprendían a Webb al respecto.ta, Frank no se había visto perseguido de manera acuciante por el fanperó. En aquel lugar se palpaban las presencias, pero no más que en el valle o en las colinas de los alrededores. Tratándose de un tipo realisdes de la ciudad, encontró la tumba de Webb, se quedó delante y esponerlo todo lo que pudo, visitó el cementerio de mineros en las lin
– Oh, así es Frank, cuando llegue el momento hará lo que tenga que hacer, siempre ha sido una persona excesivamente práctica, nada más…
– Es como si nos hubiéramos especializado, papá. Reef es puro nervio, Kit se lo piensa todo científicamente, yo soy el que insiste e insiste, día tras día, como ese tipo del este que intenta transformar a gol_pes la plata en oro.
– Deuce y Sloat no están en Telluride, hijo. Y nadie aquí te diría nada aunque lo supiera. Lo cierto es que a estas alturas es posible que se hayan separado.
– Es a Deuce y a Lake a quienes quiero encontrar. A lo mejor él la abandonó hace ya un tiempo, a lo mejor ella es ahora otra mujer caída y él cabalga con ganas hacia lo que se imagina que es su futu_ro. Es posible incluso que haya cruzado el Rio Bravo.
– A lo mejor es eso lo que él quiere que pienses.
– No debería quedarse mucho más en Estados Unidos, ahora van a por él sus viejos compadres, corren malos tiempos y muchos jovencitos que se las dan de duros harían el trabajo a buen precio, así que ya no es más que un peso muerto del pasado. Sólo puede ir ha_cia el sur.
Tal era el razonamiento de Frank. Webb, que ahora lo sabía todo, creyó inútil intentar convencerle de otra cosa. Lo único que dijo fue:
– ¿No has oído nada?
Algunos fantasmas hacen uu-uu-uu. Webb había tendido a expre____________________dado en llegar.gras levantaran las testas durante un minuto antes de volver a pastar concentradas…, la voz profunda del justo castigo que tanto había tarsarse desde siempre mediante la dinamita. Entonces Frank tuvo una visión, o lo que sería una visión cuando oyes algo en lugar de verlo…, y no fue el tranquilizador estruendo de la explosión minera en las montañas, sino aquí abajo, en la ciudad, retumbando por todos los rincones del valle, haciendo que incluso las vacas lecheras blancas y ne
Rostros que creía conocer resultaron ser de otros, o de nadie. Las coristas intentaban entablar con él discusiones metafísicas, como ha__ra. Acabó creyendo que se trataba de un espectro.cían los muertos andantes y demás. Una noche, en Ophir Road, Frank creyó ver a su hermana dirigiéndose al valle, manteniendo el rostro prudentemente vuelto, como hacía siempre Lake, como ocultando un pesar que no quisiera explicar en el caso de que alguien le pregunta
Frank acompañó a Merle a despedir a Dally a la estación.
– Me gustaría viajar contigo, hasta Denver al menos, pero algunos de estos chicos tienen otras ideas. Así que escúchame: mi hermano Kit está en el este, va a Yale, que está en New Haven, ¿Connecticut?, no mucho más lejos de Nueva York que Montrose de aquí, así que por favor ponte en contacto con él si puedes, es un buen chico, un poco despistado hasta que te presta atención, pero todavía no se ha inventa_do lío del que él no pueda sacarte, así que no dudes en recurrir a él, ¿me has oído?
– Gracias, Frank, por preocuparte por mí, con todo lo que tienes que preocuparte por ti.
– A lo mejor es porque Kit y tú sois de la misma cuerda.
– Pues en ese caso ni me acerco a él.
Por el andén, Dally recibía las miradas de aquellos que domina__ciones:ban las artes parentales, muchos de los cuales mostraban serias obje
– Permitir que un niño viaje sin la supervisión de un adulto a lo lar____________________cia ante muchos, por no decir la mayoría, de los tribunales del país…versión como la ciudad de Nueva York sin duda sería causa de denungo de dos tercios de un continente hasta un conocido nexo de per
– Por no mencionar el juicio en el banquillo de los acusados de la Moralidad Cristiana, cierto e inmisericorde, y ante el cual todos los poderes temporales, incluidos los jueces, deberán postrarse…
– Señora -comentó la impertinente joven de la que hablaban-, si puedo sobrevivir a una noche normal de sábado en Telluride, no hay nada en el este que suponga demasiado problema.
Merle sonrió risueño, y por una vez se aproximó a expresar algo parecido al orgullo paterno.
– Ahora ándate con cuidado, Dahha.
Todo el mundo ya había subido, y el tren se disponía a partir mar__timo momento.cha atrás, como si no soportara perder de vista Telluride hasta el úl
– Nos vemos, papá.
Se habían abrazado con tanta frecuencia que ella no se sentía in_cómoda con los 'abrazos' de despedida. Merle, que se hacía una idea precisa de lo que estaba en juego en ese momento, sabía que más va____________________bién que pasaría.que sólo fuera otro día. Pero conocía ese sentimiento y sabía tamrazón al otro. En teoría, ambos sabían que ella, tarde o temprano, se marcharía, aunque lo único que él deseaba ahora era postergarlo, aunlía no asustarla. Ninguno de los dos había querido desgarrarle el co