Desde ese momento, la plataforma centrista reflejó en cierto modo la idea de que el crecimiento incontrolado de esa expansión y esa colonización conduciría a un alejamiento irreversible de los centros de cultura humana y, en opinión de algunos, a la guerra entre culturas que se desarrollaran con suficientes intereses comunes como para erigirse en rivales y con diferencias suficientes como para ser enemigas.
Pero al margen de los científicos sociales como Pavel Brust, principal exponente de la Teoría de la Difusión, la mayoría de los centristas pensaban que sufrirían daño si se seguía colonizando, por ejemplo, las estaciones estelares, que debido a su posición se volverían periféricas dentro de la dirección de la expansión; y los chicos de los años de guerra, que se habían visto ahogados por un ciclo de conflictos que ellos no habían elegido.
Los centristas recibieron un apoyo considerable debido a dos hechos: primero, la transición pacífica en la Alianza entre la administración de guerra de los Konstantin a la de los Dee, moderados; segundo, el descubrimiento de una región habitada y bien desarrollada al otro lado de Sol. La expedición de Sol rechazada con firmeza por los extraterrestres del Pacto, volvió hacia el espacio humano, y en el partido centrista apareció un dogma según el cual un período de estabilidad y consolidación tal vez podría fomentar una reunificación de la humanidad, o al menos un período de paz. Para algunas personas preocupadas por la conciencia de que la humanidad no sólo no era la única habitante del espacio, sino que tenía competencia extraterrestre, ése era el curso de acción más seguro.
En 2389, los abolicionistas se unieron formalmente a los centristas. Los abolicionistas se oponían a los medios por los que se diseñaban las colonias existentes y propuestas, algunas veces por razones económicas y otras por razones morales, fueran filosóficas o religiosas; protestaban contra prácticas que iban del lavado de cerebro a la psicocirugía, y pedían el fin de la producción de azi. Previamente, los abolicionistas habían carecido de una voz a nivel público y eran más que nada un grupo heterogéneo de oposición al gobierno, que incluía a los Ciudadanos por la Autonomía, grupo que deseaba desmoronar el gobierno y hacer que todos los mundos y estaciones fueran independientes del poder central; al Comité Contra la Experimentación Humana; al Consejo de Religión; y a otros, entre los que figuraba, sin reconocimiento del partido oficial, el Comité del Hombre, una sección muy radical, que cometía actos de secuestro y terrorismo dirigidos contra las instalaciones de investigación genética y los funcionarios del gobierno. Para los que temían la influencia de Sol y los que consideraban que la posibilidad de una guerra contra extraterrestres era mínima, las ideas centristas parecían peligrosas: los expansionistas temían sobre todo a la pérdida de inercia en el movimiento de expansión y al colapso económico. Y ala cabeza de los nuevos expansionistas estaba una coalición de varios intereses, y entre ellos, como científica, filósofa y figura política, figuraba Ariane Emory.
Su asesinato en 2404 desató un furor contra los abolicionistas, pero en realidad toda la coalición centrista se derrumbó ante el ataque.
A este hecho siguió un período de retirada, reorganización y realineamiento, hasta que en 2412 se descubrió el complot de Gehenna y las investigaciones subsiguientes proporcionaron a los centristas un motivo de lucha. Gehenna dio cuerpo a los miedos de los centristas; y al mismo tiempo ensució la imagen de la mayoría expansionista, entre ellos, la de Ilya Bogdanovitch, el presidente de los Nueve; la de Ariane Emory, de Reseune; y la del almirante Azov, controvertido jefe de Defensa, que había aprobado el plan.
Los centristas obtuvieron una minoría en el Senado de Viking por primera vez en 2411, y también en el Concejo de Mariner; y retuvieron un número considerable de escaños del Senado y puestos dentro del Senado de Cyteen. Así ganaron un porcentaje sin precedentes en el Concejo de los Mundos, y con frecuencia dominaron los votos de los Nueve.
Aunque no alcanzaban la mayoría en ninguno de las dos instituciones, ya no se podía ignorar su influencia, y los rápidos avances de los centristas preocuparon a la mayoría expansionista y provocaron que los delegados independientes se convirtieran en un elemento importante: los delegados que no tenían el voto prefijado se veían cortejados con fervor y provocaban cargas y contracargas de intercambio de influencias y corrupción abierta, situación que provocó que se repitieran las votaciones para las nominaciones, aunque ninguna, sin embargo, logró desbancar a los titulares.
El mismo tejido interno de la Unión estaba en juego en esa pugna de grupos de intereses. Algunos teóricos políticos cuestionaron la sabiduría de los fundadores, que habían creado el sistema de electorados, y sostuvieron que el sistema alentaba a los sectores autónomos a votar por sus propios intereses en perjuicio del de la nación.
Nasir Harad, presidente del Concejo, en su reelección, después de haber sido acusado de corrupción, acuñó el siguiente aforismo: «La corrupción significa que los funcionarios elegidos conceden votos a cambio de ventajas para sí mismos; la democracia significa que hay un bloque de votantes que hace lo mismo. Los electores conocen la diferencia.»
I
Los altavoces para el público transmitieron un anuncio en los pasillos del Ala Uno; alerta de tormenta, pensó Justin, que siguió solucionando un problema en el teclado mientras Grant se levantaba y se asomaba a la puerta para ver de qué se trataba.
—Justin —dijo Grant, con urgencia—. Justin. Él apartó la silla y se levantó.
Todo se había detenido en el pasillo y todos estaban de pie, escuchando.
—... en Novgorod—decía el altavoz—/ en la forma de un escrito que presentaron esta mañana los abogados de Reseune en defensa de Ariane Emory, una menor de edad, que exige un Auto de Sucesión y un interdicto contra cualquier procedimiento de Descubrimiento que quiera aplicar el Concejo contra Reseune. El escrito afirma que la menor, que cumplirá nueve años dentro de cinco días, es la persona legal de Ariane Emory por derecho de Identidad Maternal, y que no se puede tomar disposición alguna con respecto a la propiedad de Ariane Emory en ninguna causa sin un juicio previo contra la menor y sus tutores. El segundo escrito pretende que se interrumpan las actividades de la Comisión Investigadora porque los interrogatorios invaden la intimidad personal y comprometen el bienestar y los derechos de propiedad de una menor.
»Las noticias llegaron a la capital cuando la Comisión se preparaba para aprobar un proyecto de ley para exigir que se le entregaran los informes de los Archivos de Reseune relacionados con la ex canciller, ya que esos documentos pueden contener información sobre proyectos del tipo del de Gehenna, ya sea en forma de planes o de proyectos ya realizados.
»Mikhail Corain, líder del partido centrista y canciller de Ciudadanos, declaró: "Es una maniobra obvia. Reseune ha llegado al colmo de su falta de ética."
»Al conocer el comentario, James Morley, jefe de los concejales por Reseune, declaró: "No queremos seguir adelante con este juicio. La intimidad y el bienestar de la menor han sido nuestras consideraciones prioritarias desde el momento en que fue concebida. No podemos permitir que se convierta en víctima de la política partidaria. Tiene derechos y creemos que el jurado nos dará la razón. No hay duda alguna sobre su identidad. Un simple análisis de laboratorio puede confirmarlo.
»La Administración de Reseune se ha negado a hacer comentarios...