Agradecimientos
Me inclino de nuevo ante mi agente, Pam Ahearn, por la que siento una honda gratitud. Hemos recorrido un largo camino, ¿no es cierto? A Mark Tavani, Bech Stvan y la gente maravillosa de Random House Promotions and Sales, gracias de nuevo por su increíble labor. Son los mejores, sin lugar a dudas.
Un agradecimiento especial a un excelente novelista y amigo, James Rollins, que me salvó de ahogarme en una piscina de Fiji; a Laurence Festal, que me prestó una ayuda incalculable con el idioma francés; y a mi mujer, Eli-zabeth, y Barry Ahearn, que dieron con el título.
Por último, este libro está dedicado a Gina Centrello, Libby McGuire, Kim Hovey, Cindy Murray, Christine Cabello, Carole Lowenstein y Rachel Kind. Siete damas maravillosas, profesionales todas. En conjunto, han aportado una sabiduría implacable, un liderazgo sistemático y una creatividad vibrante a todas mis novelas. ¿Qué más puede pedir un escritor? Es un honor formar parte de su equipo.
Con todo mi afecto.
Steve Berry