Annotation
El hechicero comenzó a escribirse en 1939 pero no fue publicada hasta 1957. Se la considera por el propio Nabokov “como la primera palpitación de Lolita”, no sólo por la relación puramente temática sino por el gusto del escritor por las obsesiones. La novela trata la historia de un joyero que observa a una niña de doce años un día en el parque jugando al lado de su madre. Este hombre se enamora perdidamente de ella, hasta el punto de que planea casarse con la madre, una vez se ha enterado de que el padre ha muerto, sólo para estar cerca de la niña.
Vladimir Nabokov
EL HECHICERO
EDITORIAL ANAGRAMA
BARCELONA
Título del original en ruso:
Volshebnik
Título de la 1. a edición en inglés:
The Enchanter (traducción de Dmitri Nabokov)
G.P. Putnam's Sons
New York, 1986
Traducción de Enrique Murillo
Portada:Julio Vivas
Ilustración: "Kizette en rose", Támara de Lempicka, 1927
Vladimir Nabokov, 1957, por la primera nota del autor
© Article 3B Trust under the Will of Vladimir Nabokov, 1986, por el texto original y la segunda nota del autor
© Dmitri Nabokov, 1986, por el texto inglés y el postfacio
© EDITORIAL ANAGRAMA S.A., 1987
Pedro de la Creu, 58
08034 Barcelona
ISBN: 84-339-3099-0
Depósito legaclass="underline" B.10 651-1987
Printed in Spain
Diagráfic, S.A., Constitució, 19 — 08014 Barcelona
PRIMERA NOTA DEL AUTOR [1]
A finales de 1939 o comienzos de 1940, [2] en París, durante una época en la que me vi obligado a guardar cama debido a un grave ataque de neuralgia intercostal, la primera y aún débil palpitación de Lolitarecorrió todo mi cuerpo. Hasta donde puedo recordarlo, este estremecimiento inicial de inspiración fue en cierto modo provocado por la lectura de una noticia acerca de un mono del Jardín des Plantes que, engatusado por un científico durante varios meses, terminó haciendo el primer dibujo que haya sido garabateado jamás por un animal. Su garabato representaba los barrotes de la jaula del pobre bicho. El impulso que registro aquí no tuvo conexión textual con el subsiguiente hilo de mis pensamientos, que, no obstante, dio como resultado un prototipo de Lolita,en forma de un relato de unas treinta páginas. [3] Lo escribí en ruso, el idioma que había utilizado para mis novelas desde 1924 (las mejores de las cuales no han sido traducidas al inglés, [4] y que están, todas ellas, prohibidas en Rusia por motivos políticos [5] ). El protagonista masculino era centroeuro-peo; la anónima nínfula, francesa; y los escenarios, París y Provenza. [Sigue aquí una breve sinopsis de la trama, en la que Nabokov se refiere al nombre del protagonista masculino; le llama Arthur, un nombre que quizá aparecía en algún boceto perdido hace mucho tiempo, pero que no se menciona ni una sola vez en el único manuscrito conocido.] Una noche empapelada de azul [6] les leí el cuento a un grupo de amigos: Mark Aldanov, dos revolucionarios sociales, [7] y una doctora; [8] pero no me gustaba, y lo destruí poco después de mi traslado a los Estados Unidos en 1940.
Hacia 1949, encontrándome en Ithaca (al norte de Nueva York), esa palpitación, que no había enmudecido, comenzó a acosarme de nuevo. La combinatoria dio nuevo impulso a la inspiración y me condujo a dar un nuevo tratamiento al tema, esta vez en inglés, el idioma de una tal Miss Rachel Home, la primera institutriz que tuve en San Petersburgo, allá por el año 1903. La nínfula, ahora con una gota de sangre irlandesa, era prácticamente la misma zagala , ytambién subsistía la idea básica del matrimonio con su madre; pero, por lo demás, todo era nuevo, y había adquirido en secreto las garras y las alas de una novela.
Vladimir Nabokov, 1956
SEGUNDA NOTA DEL AUTOR [9]
Tal como expliqué en el artículo que añadí a Lolita, enotoño de 1939, en París, escribí una suerte de nouvellepre -Lolita.Estaba seguro de haber destruido aquel manuscrito hacía mucho tiempo, pero hoy, cuando Véra y yo coleccionábamos algunos materiales para su entrega a la Biblioteca del Congreso, apareció una única copia del relato. Mi primera reacción fue la de depositarla (junto con un paquete de fichas con material para Lolitaque no llegué a utilizar) en la B. del C., pero después cambié de idea.
Se trata de un relato de cincuenta y cinco páginas mecanografiadas, en ruso, y tituladas Volshebnik(«El hechicero»). Ahora que ya se ha roto mi relación creadora con Lolita,he vuelto a leer Volshebnikcon un placer mucho más considerable que cuando lo recordaba como un simple residuo desdeñable mientras trabajaba en Lolita.Es una bella muestra de prosa rusa, precisa y lúcida, que podría ser esmeradamente vertida al inglés por los Nabokov.
Vladimir Nabokov, 1959
NOTA DE DMITRI NABOKOV
SOBRE LA TRADUCCIÓN AL INGLÉS
He redactado un breve comentario con el propósito de aclarar algunas imágenes concentradas (que, en algunos casos, también me dejaron perplejo a mí en el primer momento), y de proporcionarle al lector curioso unos cuantos detalles incidentales. A fin de que el lector pueda seguir ininterrumpidamente el relato, he colocado mis comentarios al final y, con una sola excepción, he evitado la distracción de las notas en el propio texto.
El hechicero
Vladimir Nabokov
«¿Cómo explicármelo, cómo reconciliarme conmigo mismo? —pensaba, las pocas veces que llegaba a pensar—. No puede tratarse de lascivia. La carnalidad más tosca es omnívora, mientras que la otra, la refinada, exige que haya, tarde o temprano, una satisfacción. Y si bien es cierto que he vivido cinco o seis aventuras de las corrientes, ¿acaso podría comparar su naturaleza insípidamente fortuita con esta otra llama tan singular? ¿Qué pensar de ésta? En nada se asemeja, por supuesto, a la aritmética del libertinaje oriental, en el que una pieza resulta tierna en razón inversa a su edad. Oh, no, no puede ser contemplada como un grado especial dentro de un conjunto genérico, puesto que se trata de algo que está absolutamente divorciado de lo genérico, algo que no es
másvalioso sino
incomparabl
e. ¿Qué es, pues? ¿Enfermedad, delito? Por otro lado, ¿resulta compatible con los escrúpulos y la vergüenza, con la mojigatería y el miedo, con la continencia y la sensibilidad? Porque ni siquiera soy capaz