Llevo más de diez años publicando en Harper Collins, y creo que es de justicia que después de una década de esforzado trabajo en mis libros dé las gracias a mi editora, Julia Wisdom, que no sólo me ha aportado sus perspicaces consejos y ha hecho que mis libros se vendan con éxito, sino que ha sido también una de mis mayores defensoras en la empresa.
Por último, me gustaría dar las gracias a mi esposa, Jane, que me ha ayudado en mi investigación y espoleado durante los largos meses de redacción, y ha sido mi primera lectora y crítica, sin desfallecer nunca. Algunos creen que ser escritor es duro, pero pensad por un momento en la mujer del escritor, que además de trabajar y prestar su apoyo tiene que presenciar abundante tortura y sufrimiento, sin obtener elogios y escasa compensación por los horrores que se ve obligada a presenciar. Es algo que sólo harías por amor, y le doy las gracias y se lo devuelvo multiplicado por dos.
Robert Wilson