LUCERO: El caballo de casa. Era cruzado de país y americano, y movía larga cola blanca
LUCERO: El quitanieblas del obispo de París, que abriéndole en la oscura noche, el que iba debajo veía como de día
LYON: Ciudad y feria de Francia, famosa por las sedas y la ratafia. Algunos la comparan con Medina del Campo
MACÁREA, Doña: Princesa bizantina, gentil dueña del ratón blanco muy gracioso, que la punta del rabo adornaba con tres manchas negras
MANUELA DE CARLOS: Criada de la casa, a quien yo enseñé a escupir huesos de cerezas. Con ella casé cuando me puse de barquero
MARCELINA, La señora: Sobrina del escribano de la Azumara y cocinera mayor en Miranda. Se enamoraba de los pasajeros, lo que no era poco trabajo. Cuando don Merlín se fue, puso fonda en Lugo
MEIRA: Convento de bernardos que fue, Santa María la Real de Meira, junto a la fuente donde el Miño nace. Mulas de mucha fama, por la sobriedad y meceo del paso, y botica de fama, con escuela de simples por Dioscórides y de flemas por Teofrasto Paracelso. Ahora es una ruina
MERLÍN: Mí señor amo y maestro, del que no digo que "santa gloria haya", porque no llegó noticia de que muriese
MICHAELOS, El imperante don: Basileo de Constantinopla, Comneno Angelis Láscaris, Hipogeneta apelado, que nació yendo su madre cabalgando, y la ilustre señora ni se apeó para parirlo. Está perdido en las arenas del Desierto
MIRABILIA: Uno de los quitasoles del obispo de París. Lo usa Su Ilustrísima el día de Pentecostés, y estando el prelado debajo, adquiere el don de lenguas
MONDOÑEDO: Ciudad de Galicia, nombrada en el prólogo del "Quijote" por poner Cervantes cita de famosas cortesanas, que la vida de éstas escribiera el obispo Guevara. Tiene ferias de fama el día de San Lucas, y lo son de caballar bravo, hierro, boj y miel. En ella nació el señor Cunqueiro, donde se oye cantar el agua de la Fuentevieja, que fue quien puso en romance estas historias. Es rica en pan, en aguas, en recoletos huertos con camellos, naranjos y mirlos, y en latín
MUJER DEL HERRERO, La: Hija del señorito mayor de Humoso. La madre vino muy moza a Pacios, casada con el solador de Noste, y el mayorazgo de Humoso, que se hacía allí los zuecos, desde que la vio se enamoró, y el marido por más que celaba no pudo ahuyentar el gavilán de la paloma, y siendo hombre pacífico y ganador de su pan, cuando nació la Argimira, que así se bautizó a la recién, contestaba a las burlas de los que le atestiguaban la grande cornamenta que le pusiera el hidalgo de Humoso, diciendo: "¡Como había que matarlo o dejarlo!"
NÁPOLES: Escopeta de dos cañones del señor Merlín, regalo del joven sotaínfante de Palermo a mi amo, cuando éste le compuso los vientos al perro Perrís, braco tiznado que tenía bula del Papa para parar las perdices en Castelgandolfo
NEY: Perro de la casa
NISTAL, Romualdo: Maragato que tenía tienda en manzanal. Se supo que era hombre lobo cuando se ahorcó en la robleda de Dueñas
NORES: Otro perro de la casa. Estaba educado para la nutria, y era negro como la noche. Se acostumbró a dormir en mi camareta
NOSSOLINI, Don Piero: Monseñor Grande Inquisidor de Nápoles y las Dos Sicilias y la Isla de Capri. Exorcizó el demonio que se hizo bañera en Fossano para mejor ver a las monjas desnudas
NOVAS, Su Excelencia: Acompañante portugués de la sirena griega doña Teodora. Trajeron las gacetas que cuando llegó a Lucerna con la anabolena, ésta lo mimara tanto por el camino, que allá se fue Navas con la sirena a lo profundo de la laguna. Tenía mercería en Mirandela, y lo heredó una sobrina que estaba casada con un tejedor que hacía, con título de cámara, las medias blancas para los infantes de la Casa de Braganza, que son muy chatos de pantorrilla, como se ve por las pinturas
OBISPO DE LAMEGO, El señor: El mitrado Cojo de Lamego de Portugal; tenía un aristón de Bruselas y crió un cuervo que hablaba en latín. Le compraba a mosiú Simplom bolas de nieve y cajas de música. Puso las sinodales en Verso portugués, tomando "Os Lusiadas" por modelo de octavas, y enseñaba a sus clérigos a hacer por propia mano la mayonesa cuando iba de visita pastoral
OMEGA, Don: Relojero mayor de Suiza, vecino que fue de la ciudad de Ginebra
"PABLO Y VIRGINIA" Novela de Bernardino de Saint-Pierre que leía llorando la condesita rubia de Belvís cuando estaba preñada del señorito de Balmonte
PABLO Y VIRGINIA: Dos sauces de la orilla del Miño, en el inventario de las propiedades de don Merlín en Miranda de Lugo
PARÍS: París de Francia, ciudad del obispo de los quitasoles y del quitatinieblas, en las orillas del río Sena. Allí tiene tienda el demonio Cobillón de perfumes y jabón de olor. Sus mujeres tienen fama de ser de pluma. Allí castraron a maestro Abelardo por culpa de los amores que tuvo con la sobrina de un canónigo, llamada Eloísa; del hijo de entrambos, Astrolabio, vienen los Villíers de l'Isle-Adam, parientes de mi señor Merlín. Es una ciudad famosa por sus riquezas y por sus engaños
PARÍS, Don: Principe del pueblo enano de los caldeos, buscadores de la sierpe Smarís. Quería amonedar la viga de oro
PARSIFAL, Don: Caballero de Bretaña de quien contaba en verso la historia doña Ginebra, de cómo fuera a la demanda del Grial
PETRUS MUNIUS, Dominus: Abad de Meira, en cuya capucha hizo noviciado el paje enano bizantino que venía en procura del ratón de doña Macarea
PICHEGRU: Mote del paje Francote, enamorado de dama Anglor, la princesa del río, con sólo verla desnuda por un instante en el famoso puente de Aviñón, la noche de San Juan
RUFAS, Al Hach Ismael Ibn Sína: Jeque del Desierto, envenenado por haber olido un melocotón. Castrador de camellos, es dueño de la alfombra voladora
SAL-EL-SOL: Paraguas del obispo de París, que abriéndolo en la mañana de la Asunción de Nuestra Señora, aunque llueva, solea súbito
SCAREFLY, Infante Don: Músico francés, planchador de almidón en Versalles, punto fijo de lady Fog, reina de Tule, y por quien los tulesinos traen por armas las ilustres lises de Francia
SEGOVIA: Perro alano de Su Majestad don Carlos VII, que siguió el rastro del hombre lobo en los montes de León
SILVESTRE, Don: Figura de respeto que tomó el demonio Croizás cuando vino a Miranda con doña Simona la encantada
SIMONA: Princesa de Aquitania, encantada por el demonio Croizás, y que en Miranda recobró la natural y hermosísima figura, de la que nunca me olvido
SIMPLOM, Mosiú: Relojero que fue de los señores duques dé Saboya; se puso a la muerte en Pacios, viajando a Lamego, a llevarle al mitrado las bolas de nieve
SMARIS: Sierpe de casta céltica, bilingüe, cuyos huevos harán de los enanos caldeos un pueblo de gigantes. Se dice que Gargantúa fue destetado con una cucharada de la clara de uno de estos huevos
SORIA: Ciudad de los linajes, pura cabeza de Extremadura. En ella vivía la viuda doña Florinda, a quien enamoró el demonio Cobillón