5. Camino por la calle. Hay un pozo en la vereda. Coloco tablas encima. Puedo continuar mi camino y ya nadie más caerá en él.
LO QUE TÚ SALVARÍAS
Durante mi estadía en el castillo que alquiló una revista brasilera en Brissac, Francia, un periodista de la región se acercó para entrevistarme. En medio de la conversación, a la que asistían otras personas, él quiso saber:
– ¿Cuál fue la mejor pregunta que le haya hecho un periodista?
¿Mejor pregunta? Creo que ya me hicieron TODAS las preguntas, menos la que él acaba de hacerme. Me tomo mi tiempo para pensar, estudio las muchas cosas que quería decir y nunca quisieron saber. Pero finalmente, confieso:
– Creo que fue exactamente ésta. Ya tuve preguntas que me rehusé a comentar, otras que me permitieron hablar de temas interesantes, pero esta es la única que no tengo cómo responder con sinceridad.
El periodista anota. Y dice:
– Le voy a relatar una historia interesante. Cierta vez, fui a entrevistar a Jean Cocteau. Su casa era un verdadero amontonamiento de adornos, cuadros, dibujos de artistas famosos, libros, Cocteau guardaba todo, y tenía un profundo amor por cada una de aquellas cosas. Fue entonces que, en medio de la entrevista, se me ocurrió preguntarle: "si esta casa comenzara a incendiarse ahora, y usted sólo pudiera llevarse una sola cosa consigo, ¿cuál elegiría?"