Выбрать главу

Nuevamente soltó una carcajada, esa era su forma particular de expresar su desafío a la vida ordinaria. Estoy segura de que puede hacer lo que dice, aunque me parece difícil de imaginar, lo oigo y me da un poco de asco.

Cenamos juntos en el restaurante La Cocina de los Yang de unos taiwaneses. Durante la comida me pude dar cuenta de que su novio el policía me tenía ganas, tomaba un pequeño sorbo de vino tinto y luego presionaba su rodilla contra la mía. Yo permanecía inmutable, mientras tenía la boca llena de jugosos mejillones pensaba qué diferencia habría entre un policía y un hombre común en la cama. Tal vez él trate a las mujeres que tenga debajo como a un ciudadano que viola la ley y las aplaste severamente, ¿lo tendrá tan feroz? ¿resistirá mucho?

Pensando así la lengua se me llenó de un líquido agradable, sentí una tibieza especial en el vientre como si una mano grande me sobara.

Madonna gritó:

– ¿Qué carajos pasa?

Furiosa tiró los palillos. La rodilla de enfrente de pronto dejó de moverse, yo no aguantaba la risa.

El mozo llegó rápidamente.

– ¿Por qué hacen cosas tan asquerosas? Apuesto a que su cocinero se quedará pelado, ojalá que no le quede ni un pelo -señalando el tazón de sopa gritaba groseramente.

El gerente del restaurante también vino, se disculpaba todo el tiempo, mientras hizo que el mozo se llevara la sopa de pollo negro con bayas en la que flotaba un pelo.

Inmediatamente trajeron otro tazón de sopa y un plato de postres de regalo.

A la noche descubrí en mi cartera el regalo que me dio Madonna, probablemente me lo puso a escondidas. "Verdaderamente es una loca" pensé moviendo la cabeza, guardé la cosa en un cajón, me bañé y me fui a la cama. El sueño envolvió mi cuerpo como una ola en luna llena, ese fue el día en el cual recuerdo haber conciliado el sueño con más facilidad. Mi Tiantian, mi novela, mis preocupaciones, los problemas de mi jodida vida, a todos los eché en un pozo sin fondo, primero un buen sueño y luego lo demás.

Cocó querida, no te angusties, al despertar será el día siguiente al día anterior.

Por la mañana del otro día mi vecina la gorda encontró una carta y una postal en mi buzón, y amable como siempre me los trajo.

Le agradecí y me senté en el sillón.

La carta era de Tiantian, la postal era de Mark, venía de México. Dudé un instante y decidí leer primero la postal. La postal tenía un cactus enorme como una pagoda en medio del desierto. Al otro lado había unas letras en inglés difíciles de descifrar.

"Corazón, estoy en México en un viaje de trabajo. Es Un lugar un poco sucio pero muy interesante. Aquí por todos lados hay marihuana, triciclos y mujeres tristes de pelo negro y ojos azules. En el hotel he comido muchos chiles de los más picantes en el mundo, cuando te bese la próxima vez seguramente que te picará. Supongo.

"P.S. Mi cliente, un productor multinacional de vidrios de seguridad, es muy difícil. También viajaré a Europa y a las oficinas centrales de mi empresa en Alemania para investigar el mercado del vidrio y a un competidor que nos señaló el cliente. Te veré en medio mes.

"P.P.S. Te hablé muchas veces por teléfono y siempre estaba ocupado, piensa en instalar Internet, puedo ayudarte a solicitar una cuenta gratis de Hotmail.

Besos,

Mark."

Besé la postal, mi teléfono ha estado mucho tiempo descolgado, pensé que él adivinaría que yo estaba escribiendo. Por él no tengo que preocuparme en absoluto, es un pilar de la sociedad, apuesto, inteligente, tiene un trabajo envidiable, es bueno para resolver todo tipo de relaciones complicadas, tiene un gran equilibrio personal (es un Libra clásico) y con las mujeres se relaciona como pez en el agua.

Sólo con que él lo quiera, aunque yo me vaya al Polo Sur, él encontraría la manera de comunicarse conmigo.

Las capacidades de Mark parecen un regalo de Zeus, Tiantian es totalmente opuesto a él, parecen personas de dos mundos diferentes. Ellos se entrecruzan como imágenes invertidas en mi cuerpo.

En la mesa encontré una navaja plateada para abrir cartas, regularmente no empleo esa manera sofisticada de abrir las cartas, pero en esta ocasión me hacía sentir menos nerviosa.

Tiantian había escrito sólo una hoja:

"Coco querida, escribirte en este lugar parece corno una fantasía, ni siquiera sé si esta carta te va a llegar… Ahora me siento lejos de ti, muy lejos, a años luz de ti. Vuelvo a pensar en todas nuestras cosas, mi mente se llena con pensamientos sobre ti, y no dejo de tener pesadillas.

"En una de ellas yo voy corriendo, por todos lados hay flores rosadas y frutas, las flores tienen espinas, yo corro y mientras corro sangro, después salto en un agujero muy profundo… No hay luz, oigo apenas tu voz, tú estás leyendo en voz alta tu novela, desesperado empiezo a gritar tu nombre, después mi mano se topa con una cosa redonda caliente, está húmeda y palpita.

'Yo creo que tiene que ser un corazón pero no sé quién pudo haber tirado su corazón en un agujero negro.

"Esta pesadilla la tengo una y otra vez, me pone histérico, estoy exhausto. El doctor dice que es una reacción normal de la desintoxicación, pero yo ya no quiero seguir aquí. Por todos lados hay caras tristes y sin esperanzas.

"Después del primer tratamiento volveré a casa, inmediatamente. Le ruego a Dios que me dé un par de alas. Un beso para ti, mil, diez mil besos, si existe alguna razón para vivir, esa sería amarte.

Tiantian el triste

30 de junio"

Al dorso de la carta, había dibujado una caricatura suya con las comisuras de los labios caídas como la luna en creciente y algunos pelos pegados a la cabeza. Estallé en llanto, lágrimas lacerantes corrían por mi rostro como lava.

Pensé, Dios, qué significa todo esto, qué nos depara el destino a este hombre y a mí, mi corazón siempre sufre por él, y mi alma siempre vuela por él. Yo no puedo dilucidar si lo que hay entre nosotros es amor, pero sí es una tragedia desolada, la expresión lírica más pura de la pasión, como un prisionero en una celda, como lilas danzando en el campo abierto, como peces nadando en un abismo.

Aun antes de que nuestras vidas empezaran no teníamos ninguna posibilidad. El tiempo es como un tren rápido silbando y rugiendo a través de los edificios a la distancia. Mis lágrimas no importan, las alegrías y las penas de una persona no importan, porque las ruedas de acero del tren nunca paran. Ese es el secreto que atemoriza a todos en las ciudades en esta jodida era industrial.

La droga, el sexo, el dinero, la angustia, la psique, la búsqueda del éxito, la desorientación y todo eso componen el cóctel de celebración del año 1999 con el que la ciudad espera darle la bienvenida al nuevo siglo. Para una joven como yo la poesía depende siempre del sentido último de la existencia, con mis ojos lacrimosos veré las hojas verdes, con voz cascada cantaré Dulce vida, con mis dedos frágiles retendré cada pedazo del tiempo ido, me detendré en cada uno de los recovecos de mis sueños, me agarraré de los cabellos de Dios para que me lleve, hacia arriba, muy arriba.

XXII Encuentro con los libreros

Juntémonos, los corazones solitarios desnudos bajo la luz. El tren va a toda marcha en la penumbra. Ésos son los únicos medios creados por Dios para alterar la estructura del tiempo.

Tori Amos

Deng, la editora, me llamó de nuevo, cariñosamente me preguntó si comía bien, si dormía bien, cómo iba la novela y luego si podía ir a una cafetería de la calle Shaoxing, llamada Zhongguo tong para reunirme con ella y sus amigos libreros.

Le dije que estaba bien.

El taxi llegó a Shaoxing, una pequeña calle con fuerte ambiente cultural, varias editoriales y librerías se ubicaban en ambas veredas. Esa cafetería, cuyo nombre en inglés era Old China Hand, se había hecho famosa por sus estantes llenos de libros en las cuatro paredes y la decoración con aires de los años treinta. El dueño era Er Dongqiang, un fotógrafo muy conocido, la mayoría de los clientes, todos ellos del medio cultural, periodistas, editores, escritores, directores de cine, cantantes de ópera, estudiosos extranjeros, brillaban como estrellas en el cielo en ese ambiente elegante y distinguido. Los libros, la música de jazz, el olor a café y los muebles antiguos correspondían fidedignamente a las viejas pasiones de esta ciudad así como a su orientación moderna al consumo.