Mas tarde, cuando sus padres salieron, Step la pasa buscando. Esta todo el grupo abajo esperándola: Schello, Lucone, Dario y Gloria, El Siciliano, Hook, Pollo y Pallina, y otros tipos en un carro Golf con un par de chicas. Van con las motos hacia algún lugar y cuando llegan Babi esta congelada. El lugar se llama El Colonnello y queda muy lejos. Babi no entiende porque eligieron un lugar como ese para comer. Son dos grandes salas donde se ve el horno y mesas normadísimas. Quizás se gastara poco, piensa. Un joven camarero llega para tomar las ordenes. Son quince y todos cambian constantemente de idea, excepto ella que desde el inicio decidió una ensalada mixta con poco aceite. El pobre camarero esta destruido. Trata de recapitular los primeros platos para después ir a los segundos pero cuando es el momento de los contornos ya alguien cambio de idea de nuevo.
‘Escucha jefe, danos dos pastas cortas bologna.’
‘También para mi.’ Se unen rápido algún otro y otro mas todavía. Y rápido después otros dos deciden comer la polenta o la Carbonara. Es el grupo mas indeciso que Babi alguna vez ha visto. Como si no fuera suficiente, Pollo trata de ayudar repitiendo cada vez todas las ordenes y creando aun mas confusión. A la final todos ríen divertidos. Se volvió una especie de juego. La única cosa segura es que debe llevar catorce cervezas claras medianas y una… que fue lo que ordeno la bella rubia de ojos azules?
Revisa el bloc de notas lleno de rayas y entra en la cocina acordándose que también debe traer una Coca-Cola de dieta.
La cena prosigue en el máximo de la confusión. Cada vez que viene un plato, de jamón serrano o cualquier otro entremés, es una especie de competencia, todos se lanzan encima y todo desaparece.
Las chicas con los ojos demasiado maquillados ríen divertidas.
Babi mira a Pallina buscando un poco de comprensión. También ella, sin embargo, parece ahora estar integrada perfectamente en el grupo. Llego su ensalada mixta con poco aceite. La situación no es una de las mas alegres. Ahora es el momento del cuento del Siciliano. Es la triste historia de un tal Francesco Costanzi. Tuvo la mala idea de fastidiar a su ex novia. Ni siquiera la novia, piensa Babi, la ex. Cosa de locos. Pero todos escuchan interesados y nadie parece moverse a este punto. Entonces, piensa Babi, quizás el tiene razón. La loca soy yo.
‘Entonces quieren saber que hice?’ El Siciliano toma un poco de cerveza. ‘Voy con Hook a casa de Marina porque estaba sola.’
De la otra parte de la mesa, Hook con la venda en el ojo, sonríe. Esta en el centro de la atención y se esta agarrando su pedazo de la gloria. El Siciliano continua.
‘Entonces hago que llame a este idiota de Costanzi. Ella lo llama y le dice que pase a saludarla. Y saben que hizo el infame?’
Babi mira sorprendida al grupo. Pareciera que de verdad no lo supieran. Se atreve a dar una respuesta.
‘Fue.’ El Siciliano se voltea hacia ella. Parece un poco fastidiado.
‘Exacto Babi. Así mismo. Fue este infame!’ Ella sonríe.
Después, encontrándose con la mirada molesta de Step alarga los brazos. El Siciliano no se da cuenta de nada y continua divertido su cuento. ‘Ahora viene la mejor parte. Cuando el llega, Marina hace que suba. Apenas entro, Hook y yo le saltamos encima y lo inmovilizamos. Después, no sabes que risa, lo desnudamos y lo atamos a una silla. Oh! Tenían que ver la cara que tenia. Desnudo como una lombriz. Después agarro un cuchillo de la cocina y se lo pongo en medio de las piernas. Comienza a gritar. Según Hook, porque el cuchillo estaba helado! Después entra Marina. La hicimos que se vistiera toda de ropa transparente. Bueno, le pongo la música y comienza a hacer un baile sensual desnudándose. Yo le digo al tipo: si veo que te gusta y el coso da alguna señal de vida te juro que te lo corto. Marina se queda en sostén y panties y el tipo nada que se mueve, no se si me entiendes, estaba como muerto.’
Todos ríen como locos. Una chica en el fondo de la mesa casi se cae. También Step parece divertirse. Babi no cree a sus oídos.
‘Callense, cállense…’ Dice El Siciliano. ‘A un cierto punto escuchamos el sonido de la puerta. Serian los padres de Marina? Hook y yo nos largamos y esos consiguieron al tipo desnudo en la silla con Marina semi desnuda? Les juro, una escena para morirse, para sentirse mal. Tenían que haber visto sus cara.’
‘Y que le hicieron al tipo?’
Babi mira a Pallina. Tiene también el coraje de hacer estas preguntas.
‘No lo se. Nosotros escapamos. Solo se que ese infame esta con una y tiene serios problemas para dormir con ella… después de la prueba que lo hicimos pasar, pareciera que perdió el habito. Se ve que desde que le desnudamos el coso, no sube mas.’
Es la apoteosis. Todos comienzan a reír como locos. Después no se sabe como sucedió. Un pedazo de pan vuela. De repente es una lluvia, una verdadera batalla de carne, papas, cerveza. Se tiran de todo. Las chicas son las primeras en abandonar los puestos. Babi y Pallina se alejan veloces de la mesa seguidas por otras. Los chicos continúan a lanzarse cosas de comer, con fuerza, con rabia, sin importarle las otras mesas, de golpear clientes cercanos. Lo máximo es cuando el pobre camarero trata de pararlos. Viene centrado de lleno por un pedazo de pan. Hay una especie de ovación. Ese camarero nunca le había pasado algo así en su vida. Después, es el momento de la cuenta. Pollo se ofrece de recoger el dinero. Step agarra a Babi bajo el brazo y la lleva fuera del restaurante. Uno después del otro salen todos.
Babi saca afuera la billetera. ‘Cuanto te debo?’
Step le sonríe. ‘Bromeas? déjalo así.’
‘Gracias.’
‘No me debes agradecer a mi. Montate.’
Step prende la moto. Babi sube detrás de el.
‘Entonces a quien agradezco? Pollo estaba recogiendo el dinero.’
‘No, esa es la frase convencional.’ Justo en ese momento, Pollo sale corriendo del restaurante y salta sobre su moto. ‘Vamonos muchachos!’ Todos parten acelerando veloces. Las motos chillan adelantándose y apagando las luces. Del restaurante salen corriendo el camarero y algún otro. Gritan tratando inútilmente de leer las placas.
El sonido de las motos hace eco fuerte en la calle. Uno detrás del otro, doblados a toda velocidad, salen fuera de la zona atravesando las calles, gritando y riendo, sonando las bocinas. Después, casi volando, toman la avenida principal, envueltos por el frío de la calle, del verde mojado de los bosques cercanos. Solo ahora vuelven a prender las luces.
Pollo se acerca a Step.
‘No se come mal en este Colonnello…’
‘No. Se come bien.’
‘Si, pero quería cuarenta euros por cabeza…’
‘Entonces hiciste bien!’
Pollo acelera y riendo alocadamente se aleja con Pallina. Babi se inclina adelante.
‘Eso quiere decir que no pagamos?’
‘Que, hay algún problema?’
‘Problema? Pero te das cuenta que te pueden denunciar? Quizás leyeron alguna placa.’
‘No lo logran con las luces apagadas. Escucha, siempre lo hacemos y nunca han atrapado a ninguno. Así que no des mala suerte!’
‘No doy mala suerte. Solo estoy tratando de hacerte razonar. Aunque me parece difícil. Pero no piensas en ellos del restaurante? La gente que trabaja, que esta todo el día en la cocina sudando en los hornos, que cocina para ti, te dan de comer, que limpia y tu no los consideras para nada.’